La directora del organismo público, Paola Tamburelli, realizó una visita a la empresa para hacer entrega de la certificación como Autoridad Aeronáutica, disponiendo de este modo del aval de seguridad para esta tecnología que ahora será utilizada por la aviación civil nacional.
La compañía desarrolló este equipamiento en un plazo de años teniendo siempre el asesoramiento y evaluación del organismo público nacional, además de cumplir con todos las exigencias de este tipo de material para simuladores de vuelo en el orden nacional.
Este equipo puede reproducir 13 posibles fallas de propulsión, 6 posibles fallas de los sistemas y 5 de instrumentos, cubriendo fallas o emergencias en todo tipo de situaciones extremas.
La elección de este modelo de helicóptero Bell 407 no es casual, la compañía dispone de varias aeronaves de este modelo y de la marca estadounidense. El requerimiento nace durante la crisis sanitaria, cuando los pilotos nacionales no podían trasladarse al exterior para realizar sus adiestramientos y reválidas. Además, la existencia de una importante flota de helicópteros Bell 206 y próximamente 407 en el Ejército, implicaría la posibilidad de trabajar con las Fuerzas Armadas.
