Esta titulación universitaria es una de las que tiene un mayor índice de empleabilidad, en la que más de un 95% de sus egresados en 2022 ya se encuentra trabajando como pilotos comerciales.
Además han recibido también su título oficial universitario los alumnos pilotos de la 9 promoción del Curso de Adaptación de Pasarela al Grado, que dota de oficialidad universitaria a sus años de experiencia.
Este evento fue presidido por el vicerrector de Economía de la Universidad de Salamanca, Javier González; el coronel jefe de la Base Aérea Militar y director del Grupo de Escuelas de Matacán, Jose Gallo Rosales y la presidenta de Adventia, Elena Borrego.
Tras la tradicional imposición de Becas a los alumnos del Grado en Piloto de Aviación Comercial y Operaciones Aéreas, del Curso de Adaptación al Grado y del Programa Integrado en Piloto de Transporte de Línea Aérea, los familiares les entregaron las alas que, a partir de ahora, les identificarán como aviadores.
El decano del Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial, D. Carlos San José, manifestó que: “El piloto nunca deja de formarse, en esta profesión el aprendizaje es constante, pero con vuestro Grado y vuestra licencia dais el primer paso hacia el mundo profesional.
La profesión de piloto implica asumir muchas responsabilidades, una toma continua de decisiones y la gestión de numerosos recursos. Todo ello hay que hacerlo con rigor, respetando la deontología profesional y priorizando siempre la seguridad de las operaciones.
La seguridad es el valor más importante de la aviación, y más aún del transporte aéreo comercial. Hay muchos aspectos a tener en cuenta, como la eficiencia, la puntualidad, la calidad del servicio, etc., pero la seguridad de las operaciones, y por tanto de los pasajeros, es lo principal y lo que siempre debemos garantizar los pilotos”.
Por último ha querido subrayar, Carlos San José que “para cualquier profesión contar con un colegio profesional es un privilegio y un respaldo para sus miembros y que el COPAC estará a su disposición para ayudarles ante cualquier asunto de carácter profesional.”
Además, Adventia entregó la máxima distinción de la escuela de Piloto, las Alas de Oro de Adventia, a Manuel Refoyo, técnico de mantenimiento jubilado de Senasa, por su vinculación con la escuela desde sus inicios cuando era la ENA. hasta hace apenas un año.
Tras el acto de despedida y palabras de enhorabuena y felicitación del vicerrector, se pudo a escuchar de pie el Gaudeamus Igitur, clásico himno de la Universidad.
