Fabricado en 1965, el Falcon 20 fue un éxito inmediato en el mundo de la aviación de negocios, siendo utilizado tanto por empresarios como por fuerzas armadas de diversos países. En España, el Falcon 20 se integró en el Ejército del Aire en los años 70 y 80, destacando por su capacidad de transporte de altos cargos y su fiabilidad.
Actualmente, esta aeronave está preservada y desmantelada en el hangar de Aviation Group, donde los estudiantes pueden estudiar sus sistemas internos. Equipado en su día con interiores de lujo y tecnología analógica de última generación, ahora sirve como un aula única que permite a los futuros ingenieros comprender a fondo la complejidad de los sistemas aeronáuticos.
Dassault Falcon 20
El Dassault Falcon 20, también conocido en sus inicios como Mystère 20, fue el primer jet ejecutivo diseñado por la compañía francesa Marcel Dassault. Hasta entonces, esta empresa era famosa por su trabajo en aviones de combate como el Mirage y el Rafale. En 1963, Dassault hizo su entrada en el mercado de aviación civil con este modelo, marcando un hito al combinar la robustez de un avión militar con el lujo y las prestaciones necesarias para satisfacer a clientes del sector privado.
El primer vuelo del Falcon 20 tuvo lugar el 4 de mayo de 1963, y rápidamente se convirtió en un éxito por su rendimiento y fiabilidad. Inicialmente conocido como Mystère 20, más tarde fue rebautizado como Fan Jet Falcon y finalmente adoptó el nombre que lo hizo mundialmente famoso, Falcon 20.
El avión destacaba por su diseño de ala baja y su construcción metálica robusta. Con una longitud de 17,15 metros y una envergadura de 16,30 metros, el Falcon 20 estaba equipado con dos motores ubicados en la parte posterior del fuselaje. Originalmente, utilizaba los motores General Electric CF700, pero en versiones posteriores fue actualizado con turbofanes Garrett ATFE3 de mayor potencia.
Este avión era capaz de alcanzar una velocidad máxima de 885 km/h, con una velocidad de crucero entre 750 y 860 km/h, y una autonomía de vuelo de 3.580 kilómetros. Su capacidad para volar a altitudes de hasta 13.000 metros lo hacía perfecto para vuelos ejecutivos de largo alcance. Podía acomodar entre 8 y 14 pasajeros según la configuración elegida, además de contar con una tripulación de dos pilotos.
El Falcon 20 no solo se destacó en el mercado ejecutivo, sino que fue ampliamente adoptado por fuerzas armadas de varios países, lo que subraya su versatilidad. Su producción, que alcanzó más de 500 unidades, se prolongó hasta 1988. Este avión fue utilizado por una gran variedad de clientes, desde grandes empresarios y compañías de transporte de pasajeros hasta empresas de paquetería y servicios médicos de emergencia.
En España, el primer Falcon 20 llegó en 1970, cuando fue adquirido por el Ministerio del Aire para su integración en el Servicio de Comprobación de Ayudas a la Navegación. Este avión, con matrícula EC-BVV, cumplía la misión de comprobar y certificar los sistemas de navegación aérea. Posteriormente, el Ejército del Aire español adquirió más unidades, que a partir de 1978 se integraron en el 401 Escuadrón con la denominación militar T.11, destinadas al transporte de altas personalidades del Estado.
Durante los años 80, el uso del Falcon 20 en el ámbito civil español creció notablemente, especialmente en el transporte de pasajeros VIP, paquetería urgente, aerotaxis de negocios y traslados médicos. Sin embargo, el modelo comenzó a ser reemplazado por diseños más modernos, como el Falcon 900, debido a las nuevas normativas sobre ruido que afectaban a la operación del Falcon 20 en varios países.
A pesar de su retirada gradual, un Falcon 20 alcanzó un logro notable en noviembre de 2012, cuando se convirtió en el primer reactor civil en volar utilizando un 100% de biocombustible, demostrando su relevancia incluso en la era de la aviación sostenible.
El Falcon 20 dejó un legado imborrable en la historia de la aviación, al ser uno de los primeros jets ejecutivos en alcanzar tanto éxito comercial como versatilidad operativa.
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