Anders Søreide, responsable de Deshielo y asesor en Seguridad de Aviator, detalla que la formación de su equipo se lleva a cabo siguiendo los estándares SAE (Sociedad de Ingenieros Automotrices), ampliamente reconocidos en la industria aeronáutica. "Nuestro principal objetivo es capacitar al personal para realizar procedimientos de deshielo y anti-hielo conforme a las normativas SAE, garantizando así la seguridad aérea", explica Søreide.
La preparación que se ofrece al personal combina teoría y práctica. Antes del inicio de cada temporada invernal, el personal se somete a una actualización anual obligatoria, en la que se repasan conocimientos en aula y se realizan ejercicios simulados y operaciones reales bajo supervisión. En estos ejercicios, los operadores aprenden técnicas de conducción segura alrededor de los aviones y a aplicar correctamente los fluidos descongelantes sobre superficies clave como alas y fuselajes.
Operarios de Aviator Airport Alliance realizando labores de deshielo y antihielo. Foto: Aviator Airport Alliance
"Los ejercicios prácticos, en los que simulamos situaciones reales, permiten al operador adquirir seguridad y confianza, ya que implican la realización simultánea de diversas tareas. Estas simulaciones se adaptan a las necesidades individuales; algunos integrantes del equipo requieren prácticas adicionales para dominar completamente los procedimientos", señala Søreide.
Además, Aviator mantiene una estrategia activa de mejora continua con varias revisiones anuales de sus materiales didácticos y procesos operativos. Estas revisiones integran nuevos estándares definidos por SAE, retroalimentación interna de instructores y reportes de incidentes, así como sugerencias y recomendaciones de las propias aerolíneas clientes.
Operarios de Aviator Airport Alliance realizando labores de deshielo y antihielo. Foto: Aviator Airport Alliance
Una de las dificultades que enfrenta la formación en procedimientos de deshielo radica en la escasa frecuencia de eventos climatológicos en ciertas estaciones pequeñas, donde la práctica real puede extenderse varias temporadas. Por ello, Aviator utiliza estratégicamente aeropuertos con condiciones climáticas más extremas en el norte de Noruega, como Bardufoss y Tromsø, que permiten a los operadores adquirir experiencia práctica intensiva junto a personal altamente experimentado.
La selección rigurosa de operadores es también clave en la estrategia de seguridad aérea de Aviator. Los candidatos deben contar con años previos de experiencia en pista, licencias de conducción específicas y dominar el inglés. No obstante, Søreide subraya que "el aspecto más importante es la aptitud personal para llevar a cabo simultáneamente tareas complejas, manteniendo siempre a la seguridad como prioridad número uno".
Con esta sólida y completa formación especializada, Aviator Airport Alliance confirma su compromiso con la seguridad aérea en las difíciles condiciones climáticas del norte europeo.
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