Babcock International Group ha llegado a un acuerdo con fondos administrados por Ancala Partners, un inversor en infraestructuras de mediano tamaño, para la venta de algunos de sus negocios de servicios de emergencia aérea (médicos de emergencia aérea, extinción de incendios y búsqueda y rescate) por una contraprestación bruta en efectivo de 136,2 millones de euros por la filial formada alrededor de la antigua compañía alicantina Inaer (en la que se fusionaron Helicsa, Heicópteros del Sueste y otras), con actividades en Italia, España, Portugal, Noruega, Suecia y Finlandia, donde emplea a más de 2.400 personas altamente cualificadas y operan una flota de 232 aeronaves en 164 ubicaciones operativas.
Babcock mantendrá ese tipo de servicios en los países a los que ha decidido orientarse: Reino Unido, Francia, Canadá y Australia, donde también opera negocios de defensa. La venta de esa parte sector de aviación de Babcock está dentro de su programa de alineación de cartera, para enfocar el grupo y reducir la complejidad. Para el año finalizado el 31 de marzo de 2021 reportaron ingresos de 478 millones de euros y una pérdida antes de impuestos de 208 millones de euros, incluida una contribución de 7 millones dantes de los gastos generales asignados, partidas excepcionales y otros ajustes únicos derivados de la rentabilidad y el balance de los contratos. Los activos brutos eran de 740 millones, con activos netos, excluyendo efectivo de 183 millones de euros y pasivos por arrendamientos netos, de 270 millones de euros.
Con base en cifras no auditadas para el año que finalizó en 2022, las empresas registraron ingresos de 740 millones y una pérdida antes de impuestos de 12 millones y los activos brutos ascendían a 745 millones y los pasivos netos por arrendamientos a 245 millones. La conclusión del acuerdo está sujeta a determinadas condiciones reglamentarias y de otro tipo y se espera que la operación se concluya a finales del año. HSBC ha asesorado a Babcock International en la transacción, en un proceso que comenzó hace un año. Cantor Fitzgerald ha sido el asesor financiero de Ancala Partners. En 2014, Babcock pagó 2.000 millones a los fondos Investindustrial y KKR por Avincis, grupo que englobaba a la firma española y otros negocios del sector en Europa, incluyendo la británica Bond Aviation.
Investindustrial se hizo con el control de Inaer en 2005, al pagar 205 millones por el 75 por ciento y, en 2010, KKR adquirió el 49,9 de la firma alicantina por unos 350 millones de euros. Inaer y Bond Aviation se fusionan en 2011, creando Avincis. Babcock unca pudo rentabilizar esa inversión por el aumento de costes y la rivalidad para lograr concesiones administrativas, que en España suelen adjudicar ministerios y comunidades autónomas. Ancala Partners llevaba varios meses negociando la compra en exclusiva del negocio, que es clave en la lucha contra incendios y rescates. Parte de la flota es alquilada y también hay aeronaves en propiedad. El máximo responsable ejecutivo de Babcock, David Lockwood, asegura que “el acuerdo marca otro paso importante en nuestra estrategia para alinear nuestra cartera. Me gustaría agradecer a los colegas por su compromiso y arduo”.
La compañía británica quiere centrarse en su negocio de servicios de Defensa en Reino Unido y otros pocos países. El año pasado vendió Bond Aviation –especializada en el transporte en helicóptero a las plataformas petrolíferas del Mar del Norte– al grupo norteamericano CHC, pero la Comisión británica de la Competencia exigió en junio de este año que la operación fuera deshecha. Para Ancala Partners es su segunda operación en España, tras comprar el 49 por ciento de la filial energética de Ence por 350 millones.