Este impuesto, incluido a última instancia en el proyecto de presupuesto de la diputada oficialista Paula Penacc, fue aprobado en la Cámara de Diputados. Aunque los 1,61 euros de la tasa no es una gran suma, es un monto que estará en el presupuesto y se actualizará permanentemente y es lo contrario de lo que pidió la industria a pleno en Buenos Aires durante el Foro de Líderes de Líneas Aéreas de no crear más impuestos, si lo que se quiere es recuperar el negocio aéreo y el turismo.
Según la autora del proyecto, se justifica diciendo que la gabela ya existía cuando la Policía Aeroportuaria dependía de la Fuerza Aérea, pero cuando se creó la PSA dejó de cobrarse. Dos años más tarde la tasa pasó a ser percibida por la Autoridad Nacional de Aviación Civil (ANAC), por el servicio de seguridad operacional.
Si bien los 250 pesos actuales no es un valor descomunal, lo que hace es incrementar el valor de un pasaje que, en el caso de internacional, se compone de un 49% de impuestos. Es decir, que la mitad de lo que pagan los viajeros cuando compran un billete internacional son tasas e impuestos.
Cálculo de la tasa
¿Cómo se llega a este valor? Según el proyecto, la tasa de seguridad de la aviación será de un monto fijo que determinará el ministerio de Seguridad, cuyo valor no podrá superar el equivalente a 0,25 % del sueldo básico del grado jerárquico de oficial principal del escalafón general del personal de la PSA.
Según los fundamentos, casi todo el presupuesto total de la PSA se consume con la masa salarial por lo que le queda muy poco dinero para financiar otras tareas como equipamiento y entrenamiento de los efectivos de la fuerza o atender temas fuera de su función específica, como los movimientos fuera de las estaciones aéreas, custodias, procesos eleccioanarios y demás.
El director ejecutivo de la Cámara Argentina de Líneas Aéreas (JURCA), Felipe Baravalle, dijo que: “Esta medida abre una puerta hacia un lugar desconocido. No sabemos qué servicio o qué alcance tendrá. Imaginar que los pasajeros abonen por controles de la PSA en municipios o en allanamientos ordenados por la Justicia sería algo extraño de explicar”. Mencionemos que habitualmente la fuerza de seguridad federal realiza procedimientos y allanamientos ordenados por la Justicia Federal, que obviamente tienen un costo que es abonado por los pasajeros sin saberlo.
“Las líneas aéreas ya pagan por servicios de seguridad privada en el aeropuerto. Hoy en día, la PSA por ejemplo, no cubre el escaneo de valijas que es su responsabilidad. Además, encarecemos cada vez más los boletos. En definitiva, es otro impuesto por el que pagaremos más impuestos”, mencionó el funcionario de JURCA.
Marchando en contra de las recomendaciones de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) y del sentido común, la administración nacional en manos oficialistas sigue tomando medidas que contribuyen a complicar la situación del mercado aéreo en este sector del continente.
