Durante el encuentro, la dirección del aeropuerto expresó su inquietud ante los servicios sociales del Ayuntamiento de Madrid, subrayando que las instalaciones aeroportuarias no están diseñadas ni equipadas para ser habitadas de forma permanente. Según informa el diario El Español, "el consistorio madrileño sostiene que sus equipos de calle trabajan con 71 personas sin hogar en el aeropuerto, mientras que el sindicato Alternativa Sindical Aena/Enaire (Asae) estima que la cifra total de personas que pernoctan en Barajas asciende a unas 500".
Aena realiza un seguimiento semanal de esta problemática, consciente de las implicaciones que puede tener tanto para la seguridad como para el funcionamiento normal del aeropuerto. Paralelamente, se llevó a cabo el Comité Local de Seguridad del aeropuerto, en el que participaron la Guardia Civil, la Policía Nacional y, por primera vez, la Policía Municipal de Madrid.
Las discusiones se centraron en la búsqueda de soluciones habitacionales adecuadas para las personas afectadas, reconociendo que esta tarea requiere de la intervención de profesionales especializados en asistencia social. Se hizo hincapié en la importancia de contar con personal formado y con las competencias necesarias para abordar esta compleja realidad.
Esta situación pone de manifiesto la necesidad de una acción coordinada entre las diferentes administraciones y entidades sociales para abordar el problema de las personas sin hogar en espacios públicos de gran afluencia. El Aeropuerto de Madrid-Barajas, como uno de los principales hubs de Europa, se enfrenta a un desafío que requiere una respuesta rápida y efectiva para mantener su estatus como instalación de primer nivel y, al mismo tiempo, atender a una problemática social de creciente importancia.
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